Nuestro aspecto, la forma que tenemos de relacionarnos con nuestros familiares y amigos, los mensajes que transmitimos, nuestros gestos y comportamientos… hacen que de manera indirecta las personas tengan una percepción sobre nosotros. De forma inconsciente los demás se hacen una imagen mental de nosotros. Por eso es importante diferenciarte con tu marca personal.
Entendemos marca personal como el reflejo de quién eres, y tiene que estar en continua evolución y crecimiento. No se trata únicamente de llegar a un gran número de personas, sino de ser alguien realmente conocido en una materia.
Es como considerarte a ti mismo como una marca comercial. Al fin y al cabo somos como un producto en el mercado que tiene competencia con otros artículos, entre los cuales debemos elegir. Cuando lanzamos algo nuevo a la venta necesitamos un plan estratégico, táctico… y con la marca personal ocurre lo mismo.
¿Sabes cómo diferenciarte con tu marca personal?
Toma nota:
- Objetivos: Hay que saber en qué eres bueno y potenciarlo, que es lo que te hará diferente al resto. También hay que tener claro dónde estás y a dónde quieres llegar. Saber a dónde quieres ir es determinante a la hora de acertar el camino.
- Observar a la competencia: No tienes que copiar lo que hace tu competencia, sino informarte sobre lo que está haciendo porque te puede ayudar a ver qué acciones pueden resultarte beneficiosas y cuáles evitar. Muchas veces la imagen que estamos dando no corresponde con la que queremos transmitir y hay que tener especial cuidado con eso.
- Medios a utilizar para potenciar tu marca personal: redes sociales como Linkedin, Facebook, Twitter, YouTube, etc., un blog (del que hablaremos más adelante), email marketing…
- A quién quieres dirigirte: Es un error querer llegar a todo el mundo. Por ejemplo, no se dirigen al mismo tipo de clientes una pensión que un hotel de cinco estrellas, así que tendrás que segmentar bien a tus clientes potenciales porque puedes ser el mejor haciendo una determinada cosa, pero si no llegas a tu público objetivo no servirá de nada.
- Programar cuántas veces harás publicaciones: Planificar tus publicaciones y determinar el contenido que vas a publicar en las distintas redes sociales es muy importante. No es lo mismo hacer una publicación en Linkedin, que es una red profesional y por lo tanto utilizaremos un lenguaje más cuidado, que en Twitter, dadas sus limitaciones como el número de caracteres. De igual modo, es imprescindible cuidar la forma en que te describes en redes sociales (biografía), así como tener una buena foto en tu perfil, pues será la primera visión que tendrán de ti.
- Medio propio: Es conveniente tener un medio propio. Un buen ejemplo puede ser la creación de un blog, en el que puedes mostrarte de manera más cercana con tus usuarios, y lo puedes hacer de manera muy sencilla con WordPress.
- Medición de resultados: Si llevas a cabo todo lo anterior, es primordial evaluar sus efectos, sino no valdrá de nada. Hay que tener en cuenta la interacción que tienen los usuarios con tus posts, tweets, publicaciones, etc. Estas interacciones pueden ser tanto positivas como negativas, y aunque ambas son valiosas, las negativas son los que nos ayudarán a mejorar.
Al crear marca personal conseguirás visibilidad, diferenciación, y crearás confianza y cercanía, y recuerda: Cuesta mucho ganar un cliente pero muy poco perderlo, así que esfuérzate en la creación de tu marca personal y ten mucha paciencia. Contáctanos para más información.