El Gobierno de España, a propuesta del Ministerio para la Transformación Digital y Función Pública, ha aprobado el Real Decreto 444/2024, del 30 de abril, que fija los requisitos que deben seguir los influencers para cumplir con la Ley General de Comunicación Audiovisual. El objetivo de esta ‘ley de influencers’ es regular su actividad y proteger a los consumidores vulnerables de publicidades y contenidos nocivos.
El nuevo real decreto busca homologar a estos profesionales con otros actores del sector audiovisual debido a la importancia que han cobrado en la sociedad durante los últimos años.
La ley de influencers establece una serie de criterios para definir quiénes son los individuos afectados por los cambios. De acuerdo con ella, una persona debe cumplir con tres requisitos clave para que se le considere influencer o “usuario de especial relevancia”:
- Ganar más de 300.000 € de ingresos anuales derivados de su actividad.
- Tener un millón de seguidores en una plataforma de vídeo o dos millones en total.
- Publicar contenido de forma regular, con al menos 24 vídeos al año.
Todos los usuarios que entren dentro de estas exigencias del Ministerio tienen que cumplir una serie de obligaciones durante su actividad profesional con el fin de asegurar que son transparentes con respecto al tipo de publicidad que realizan.
Estas responsabilidades son:
- Identificar de forma clara el contenido publicitario. Los influencers deben marcar explícitamente sus anuncios, de manera que no den lugar a confusiones o malentendidos que afecten a sus seguidores.
- No publicitar productos nocivos como el tabaco, los cigarrillos electrónicos, los juegos de azar o las apuestas.
- Regular la publicidad de bebidas alcohólicas. Se permite su promoción en determinados horarios nocturnos, pero no durante el día.
- Proteger a las personas menores de edad.
- Registrarse obligatoriamente en la plataforma del Gobierno. Todos los influencers que cumplan con los requisitos de esta normativa y residan en España deben inscribirse en una web oficial creada por el Estado. Esto es para realizar un mayor control y seguimiento de su actividad y ayudar en caso de duda.
Los cambios que introduce este real decreto son importantes y van a condicionar el trabajo de estos profesionales de ahora en adelante. Eso sí, muchas de las condiciones no sorprenden, ya que coinciden con las establecidas por la Ley General de Comunicación Audiovisual de 2022, que afecta a los medios de comunicación, como la televisión y la radio.